
Y te das cuenta ahora, porque te sientes sola y tienes que echar mano de esos recuerdos creados a partir de hechos. Porque ya son palabras dichas antes, la impotencia que sentiste y lo débil que te volvías a encontrar. Para luego apoyarte en personas que se sienten igual que tú, pero que te dedican sonrisas y te ofrecen ayuda, vuelven a gastar bromas, te abrazan y juegan.
Pero… de igual forma, cuando ahora, en el presente, te es imposible acercarte a cierta persona, y quieres contarle a otra algo pero no puedes porque le fallaste y tienes que comprender su estado. Y otra más que está lejos de ti y siempre sabía hacerte compañía…
Y ahora que no puedes tenerlos cerca, la soledad se vuelve a apoderar de ti antes de que puedas hacer el menor interrogante… Porque tu día fue difícil y solo tienes la soledad de las palabras y la música para contarle tus historias. ¿Y qué pasa conmigo…?